Estudios de vida útil de productos envasados

Los alimentos y los cosméticos se deterioran con el tiempo por la acción de agentes físicos, químicos o biológicos. La presencia de oxígeno o humedad, la acción de microorganismos o plagas de insectos en los alimentos o incluso la propia actividad biológica son los factores determinantes en su degradación.

Para maximizar la conservación y calidad de estos productos se ha de realizar una adecuada selección de los materiales de envase y tecnologías de envasado, y para ello son clave los estudios de vida útil. Con más de 25 años de experiencia, en ITENE somos expertos en ello.

En ITENE llevamos a cabo estudios relacionados con la vida útil de distintos tipos de productos, como alimentos o cosméticos, con distintos objetivos, como la validación de nuevos materiales desarrollados a partir de proyectos de I+D o la realización de comparativas entre distintos tipos de materiales durante etapas de selección o de modificación de las condiciones o de los materiales de envasado.

Metodología de trabajo

Nuestra metodología de trabajo, que se realiza a medida, incluye:

• Estudio del comportamiento y mecanismos de degradación del producto.
• Envasado del producto y condiciones de envasado establecidas.
• Seguimiento de los parámetros críticos para la vida útil, en función de los principales mecanismos de degradación del producto.
  • Físico-químicos: determinación de humedad, actividad de agua, pH, oxidación de grasas, determinación del contenido en ciertos compuestos (vitaminas, principios activos y perfil aromático), pérdida de peso, y análisis de textura y color.
  • Microbiológicos: crecimiento de microorganismos alterantes y patógenos.
  • Organolépticos.

¿Por qué analizar la vida útil de tu producto?

El análisis de la vida útil de un producto aporta múltiples ventajas en un escenario en el que el consumidor exige altos estándares de calidad y seguridad, ya que permite:

• Detectar posibles afectaciones o degradaciones del producto durante su vida útil, lo que podría indicar que los materiales de envase o el sistema de envasado no son los más adecuados para la vida útil deseada para el producto.
• Comparar distintas tecnologías de envasado, materiales y/o tipos de envase, para valorar la conveniencia de adoptar modificaciones en el procesado de los productos en respuesta a cambios sociales, económicos, legislativos o de otro tipo.
• Seleccionar los materiales de envase y tecnologías de envasado adecuadas para cada producto, optimizando el diseño con criterios medioambientales, económicos y de imagen de marca.
• Establecer la duración del producto envasado en determinadas condiciones.
• Proteger la salud del consumidor, al anticiparse a pérdidas de calidad del producto que supongan riesgos (ejemplo, el crecimiento de ciertos microorganismos).