El futuro Reglamento Europeo de Envases impulsa la compostabilidad como una alternativa real

El futuro Reglamento Europeo de Envases, a punto de ser aprobado, introduce cambios significativos en el ámbito de la compostabilidad. El artículo 8 dedica especial atención a este tema, estableciendo un plazo de 24 meses tras su entrada en vigor para que productos cotidianos como las monodosis de café en papel filtro, las etiquetas adhesivas en frutas y hortalizas y las bolsas de plástico muy ligeras sean completamente compostables en condiciones industriales controladas. 

A continuación, desgranamos esta y otras cuestiones importantes que esta nueva normativa aportarán al panorama reglamentario de envases. 

• ¿Cuál es el significado real de «compostable”?
• Símbolos armonizados en el etiquetado y reducción de bolsas ligeras 
• Mercado de envases: hacia la armonización y evaluación de la conformidad

1. ¿Cuál es el significado real de “compostable”?

El reglamento define las condiciones que un envase debe cumplir para ser considerado compostable. Entre ellas, se encuentra la capacidad de sufrir descomposición física, química, térmica o biológica, transformándose en su mayor parte en dióxido de carbono, sales minerales, biomasa y agua. Además, no debe interferir en la recogida separada ni en el proceso de compostaje industrial. 

Asimismo, ante la posibilidad de una contaminación cruzada entre plásticos convencionales y compostables que afecte a los flujos de biorresiduos y reciclado, el nuevo Reglamento establece unas normativas específicas para el uso de envases de plástico compostables. Se prioriza su empleo cuando contribuyan a la recolección o eliminación de biorresiduos de forma eficiente. 

2. Claves para un futuro más sostenible: símbolos armonizados en el etiquetado y reducción de bolsas de plástico

El futuro Reglamento Europeo de Envases propone la creación de un sistema de símbolos armonizados para envases y contenedores de residuos, incluidos los compostables y biodegradables. Esta iniciativa busca mejorar la comprensión del consumidor, facilitando la correcta clasificación y el posterior reciclado de los envases. 

La futura normativa promueve, asimismo, la compostabilidad industrial de las bolsas de plástico muy ligeras. Además, en aquellos lugares con sistemas adecuados para la gestión de residuos orgánicos, los Estados miembros podrán exigir que las bolsas de plástico ligeras solo se vendan si son compostables. 

Además, la norma busca una reducción sostenida de su consumo, de hecho, incluye objetivos de reducción nacionales, instrumentos económicos y restricciones a la comercialización, siempre que sean proporcionadas y no discriminatorias.  

En concreto, el artículo 29 establece que el consumo anual de bolsas de plástico ligeras no debe superar las 40 bolsas por persona antes del 31 de diciembre de 2025. Los Estados miembros pueden excluir de esta obligación las bolsas necesarias por razones de higiene o como envases para alimentos a granel para evitar el desperdicio 

3.  Un mercado de envases más sostenible: hacia la armonización y evaluación de la conformidad

Con el fin de impulsar la sostenibilidad del sector de los envases en el mercado interior, la Unión Europea se propone armonizar los requisitos en materia de compostabilidad, reducción y reutilización. 

Para simplificar el proceso de comercialización y garantizar la seguridad de los consumidores, se establece una presunción de conformidad para los envases que cumplan con las normas armonizadas. 

Además, para salvaguardar el objetivo de la nueva normativa, la Comisión se ha reservado la facultad de poder modificar ciertos aspectos del reglamento en función de avances tecnológicos y reglamentarios relacionados con la eliminación de envases compostables.