ITENE trabaja en el desarrollo de biosensores para la detección in situ y en tiempo real de patógenos en aire, agua y superficies
En el marco del proyecto BeSafe, financiado por el IVACE, también se está desarrollando un sistema integrado de monitorización de material particulado, gases tóxicos y de efecto invernadero en ambientes interiores y exteriores. Gracias a este proyecto se podrá controlar la presencia de bacterias como la E. coli o la listeria en la industria alimentaria y detectar de forma temprana el SARS-CoV-2, el Aspergillus y otros patógenos presentes en aire, rompiendo así la cadena de transmisión.
Todos estos desarrollos se encuentran enmarcados en el proyecto BeSafe, respaldado por el Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (IVACE) a través de los fondos FEDER, y que busca garantizar la salud de los trabajadores y de la población en general, al poder controlar los posibles brotes y poder romper la cadena de transmisión.
A este respecto, la responsable del proyecto en ITENE, Helena Prima, señala que “son necesarias nuevas estrategias de detección temprana más sensibles, eficientes, rápidas y que permitan el análisis microbiano directamente en el punto de muestreo, tanto en superficie como en el agua, para evitar que alimentos contaminados lleguen al consumidor o que los patógenos que se contagian por vía área, como los coronavirus, sigan transmitiéndose”.
Los prototipos de biosensores desarrollados por ITENE, con una tecnología de vanguardia y fácil manejo, se validarán en cuatros casos de estudio en ambientes hospitalarios, instalaciones industriales alimentarias y plantas de aguas residuales.
Asimismo, en el área tecnológica de Seguridad, Salud y Tecnologías de Monitorización Ambiental del centro tecnológico se está desarrollando un sistema integrado de monitorización de material particulado, gases contaminantes y de efecto invernadero en ambientes interiores y exteriores.
En este sentido, se está trabajando en la medición y muestreo de nanopartículas y material particulado en diferentes fracciones y la monitorización de contaminantes de aire interior y exterior de monóxido de carbono (CO), ozono (O3), compuestos orgánicos volátiles (COV), dióxido de azufre (SO2), amoníaco (NH3) y óxido de nitrógeno (NOx).
También se controlará a través de este dispositivo el dióxido de carbono (CO2), el cual no se considera un gas toxico para la salud, pero sí un gas de efecto invernadero y el indicativo más importante del grado de ventilación que tiene un espacio cerrado para la prevención del contagio del Covid-19. Para validar este sistema integrado de monitorización, se instalarán dos dispositivos plug & play en dos empresas y dos localizaciones urbanas para su validación en estudios piloto.
Gracias a este desarrollo se podrán medir los niveles de gases contaminantes que respiramos y los niveles potenciales de exposición a nanopartículas, las cuales se han incrementado en los últimos tiempo fruto del aumento de la aplicación de la nanotecnología en la industria europea.